lunes, 10 de octubre de 2005

Continuación y fin del suspenso

Después de un fin de semana sin internet (J. está destripando los computadores en la casa, de modo que hay dos y no hay ninguno), hoy lunes encuentro que:

-A luchar por el repechaje... aún más suspenso... "entre más sufrido mejor se disfruta" parece ser el leitmotiv... No digo que guardar la Maizena, pero por qué no vender de una vez lo que haya que empeñar? Razón no le falta a Patton.

-Y en cambio aquí por fin se acabó la lucha por la clasificación y el suspenso. No hablo de fútbol (después de la derrota 2-0 a manos de Turquía el sábado pasado en partido amistoso en Estambul nadie habla de fútbol) sino que por fin parece que ya hay Canciller. O Cancillera, mejor dicho.

Aunque por extranjera no me queda difícil simpatizar con los partidos "benévolos" hacia los inmigrantes y su integración, en Colombia ya tendía a la centro izquierda y rehuía las derechas. Yo le hacía fuercita a los socialistas y a los verdes, pero vean lo que les pasó por no haber hecho un pepino los anteriores 7 años. Ahora viene Angela Merkel como Canciller de los godos.


Izq: Ganas de un nuevo peinado? Der: Alquile un convertible!

Angie es un poco la historia de la Cenicienta. Quién hubiera creído que una Ossi*, mujer y para rematar con semejantes pelos y semejante sex-appeal hubiera podido llegar a ser la primera mujer canciller de un país como Alemania!!
*= alemana del Este. Los alemanes occidentales les tienen a sus hermanitos del Este aún cierto pesar, que es uno de los disfraces del pordebajeo y el desprecio, casi tanto como se lo pueden tener a uno de tercermundista.

Angie es tesa y sabe mejor que nadie a dónde puede llevar un disciplinado y constante nadadito de perro. Hay que ver la variedad de gañanes con la que la pobre ha tenido que lidiar en su partido, y sin embargo, ha sabido imponerse.

Así y todo, Angie no me convence. A los que ingenuamente creen que una mujer es mejor gobernante, les recuerdo a Margaret Tatcher. O que no es corrupta, tengan ahí a Mireya Moscoso y Gloria Marapapagay (o como se llame la filipina). Angie estuvo de acuerdo con las mentiras de Bush para su guerra y fue y lo visitó a manifestarle su apoyo incondicional. Le hace el feo a Turquía en la EU. Ya cambió de peluquero, pero aunque la sosa se vista de seda, sosa se queda.

Al menos se le abona que no les puso pleito a los de la agencia de alquiler de carros que la usó en su publicidad, sino que sin rechistar apareció con otro corte de pelo. Esa es Angie.

-En lo único en que se puede seguir confiando es en el glorioso DI La Tengo Viva, que sigue con su campaña triunfante. Por la victoria, hasta la victoria! hics!

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