sábado, 29 de abril de 2006

Con sevicia (merecida)

Pues sí, lo admito, este post es perverso y se ensania con sevicia en un papayazo de esta cultura nortealemana. O de esta culinaria, siendo más específica. Lo siento. Soy comprensiva, aquí no crecía nada, los inviernos eran largos, no había neveras ni comercio con el mundo. No les quedaba de otra.

En un recetario alemán dicen que este plato es sano y de alto valor nutritivo, a pesar de su apariencia horrorosa. Ellos mismos lo admiten. Es que vean nada más:



A la larga el Labskaus no es tan del demonio. Puré de papa con carne en conserva, si se quiere también se le revuelven pepinos en conserva y remolacha. Lo criminal es que al final todo se hace puré junto, lo que le da ese aspecto tan repulsivo. Y el acompaniamiento no se le queda atrás: un pescadito crudo (visitantes, pilas con los Matjes), pepinos en conserva y un huevo frito.

Y luego preguntan y hasta se molestan de que uno reniegue tanto de la comida por aquí..

En honor a la verdad, aclaro que NO todo es así. Esta es más bien una especialidad rebuscada que NO está a la orden del día por doquier, sino más bien es lo que hace la abuelita de los nativos cuando van a visitarla. Que no panda el cúnico.

2 comentarios:

patton dijo...

Se les perdona por aquello de que "en tiempo de guerra todo hueco es trinchera" o en su defecto "cualquier cosa que alimente es comida". Y no tienen la disponibilidad y acceso a diversas opciones todo el año. Y aún así nosotros somos los pobres, vea usted.

MaJaDeRiA dijo...

Marik, digame si la comida de colores de mexico, no es lo mejor de lo mejor?? Eso que haya vainas rojas, verdes, amarillas, cafes, verde oliva, y demas....me sigue pareciendo increible